Los médicos han estado evaluando la salud mental de Amanda Bynes y en las primeras observaciones determinaron que la actriz sufre de esquizofrenia.
Cuando fue detenida, la observación forzosa era solamente por 72 horas que es lo que permite la ley de California. Eventualmente, los doctores pidieron una ampliación por dos semanas más y ahora buscan otros 30 días.
Según publica TMZ, el juez que sigue el caso habría aceptado el pedido.
Los médicos aseguraron que Amanda “está gravemente incapacitada como resultado de un orden mental”.
Además, sus padres finalmente consiguieron obtener la tutela de su hija. Lynn y Rick Bynes habían asegurado que su hija es peligrosa para sí misma. TMZ reporta que el juez también habría concedido ante este pedido.
Fuente: E!