XUL-HÁ, 30 de abril.— Un caso de presunto maltrato animal ha encendido las redes y movilizado a las autoridades de Quintana Roo: un cachorro de raza chihuahua, llamado ‘Osito’, fue amarrado a un dron y elevado varios metros del suelo en un acto que quedó registrado en video y generó condena generalizada.
El incidente ocurrió el pasado 24 de abril en la comunidad de Xul-Há, en el municipio de Othón P. Blanco. Las imágenes del perrito suspendido en el aire, visiblemente asustado, circularon rápidamente por redes sociales y provocaron indignación entre usuarios, colectivos animalistas y defensores del bienestar animal.
Ante la presión social, las autoridades estatales actuaron con rapidez. La Fiscalía General del Estado, la Procuraduría de Protección al Ambiente (PPA) y la Secretaría de Ecología y Medio Ambiente (SEMA) intervinieron de forma conjunta para ubicar y rescatar a ‘Osito’, un cachorro de apenas tres meses de edad.
Actualmente, el perrito se encuentra fuera de peligro, bajo resguardo institucional y con atención veterinaria especializada.
El propietario del animal ya fue citado por el Ministerio Público para rendir su declaración. Las autoridades mantienen abierta una carpeta de investigación para determinar si el caso configura un delito de maltrato animal y proceder legalmente.
Por lo pronto, ‘Osito’ continuará bajo la custodia del Estado mientras avanza el proceso legal.
Desde distintos sectores de la sociedad civil han surgido exigencias para que se impongan sanciones ejemplares y evitar que casos como este vuelvan a repetirse. Organizaciones de protección animal insisten en que este tipo de crueldad no puede quedar impune.