Ciudad de México, 2 de junio de 2025 — Un día después de la histórica jornada en la que por primera vez en México se eligieron mediante voto popular a jueces y magistrados del Poder Judicial, la presidenta Claudia Sheinbaum calificó el ejercicio como “un éxito democrático, austero e inédito”, desestimando las críticas de la oposición que auguraban baja participación.
Durante un mensaje público, la mandataria destacó que más de 13 millones de ciudadanos participaron en el proceso electoral, cifra que —según afirmó— duplicó su pronóstico inicial, basado en el nivel de participación de la primera consulta popular realizada durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador. “Pensábamos que si votaba la misma cantidad que en la consulta de expresidentes, ya era un buen resultado, pero votó el doble. Por eso, fue un éxito”, expresó.
Sheinbaum comparó la legitimidad democrática de esta elección con los procesos legislativos: “Si comparamos a 128 senadores, o las dos terceras partes, frente a 13 millones de votantes, entonces por supuesto que es un éxito”.
A las críticas que calificaron la elección como un riesgo para el Estado de Derecho o como una imposición del Ejecutivo, Sheinbaum respondió subrayando la corrupción, el nepotismo y la falta de credibilidad que, dijo, caracterizan actualmente al Poder Judicial. “Nada más en nuestro periodo, 169 personas de la delincuencia organizada han tenido cambios de medida, muchas de ellas liberaciones. Y hay hasta 70 amparos a un solo miembro del crimen organizado”, acusó.
También señaló casos en los que, a su juicio, jueces han obstaculizado decisiones del Congreso y del Ejecutivo. “Decisiones de la Corte impiden que lo que decide el Legislativo proceda. Hay una estructura de privilegios: 50% de los miembros del Poder Judicial son familiares entre sí. Primos, hermanos, cuñados… es un nepotismo aceptado por ellos mismos”, enfatizó.
Sobre el proceso previo a la jornada electoral, la presidenta explicó que no se trató de una elección abierta sin controles, sino que hubo filtros rigurosos. “Hubo una convocatoria amplia, comisiones del Ejecutivo, Legislativo y Judicial evaluaron perfiles y currículums; luego vino un proceso de insaculación y, finalmente, campañas austeras en redes sociales y territorio”, explicó.
Finalmente, Sheinbaum rechazó versiones internacionales que hablaban de “grandes campañas”, y reiteró que la elección se llevó a cabo con recursos limitados y en condiciones de transparencia. “No fue una campaña millonaria. Fue una elección sencilla pero profundamente democrática”, concluyó.